El estudio descubrió que las personas que viven cerca de estos pequeños escenarios verdes, pueden desarrollar grandes beneficios. La salud, por ejemplo, se verá afectada positivamente con solo vivir cerca de jardines o vecindarios con parques ecológicos.
Se cree que podrían reducir riesgos de accidentes cerebrovasculares, enfermedades cardíacas, entre otras. El estudio fue realmente interesante por lo que los expertos consideraron seriamente los efectos.
¿En que se basó el estudio?
Al proceso de originó con la toma de muestras de sangres y orina de 408 personas con diferentes edades. Incluso, provenientes de distintas etnias y estatus socioeconómicos. El tiempo que se consideró fue de cinco años para poder realizar los exámenes correspondientes.
Dentro del estudio, se realizaron pruebas para determinar los riesgos de padecer lesiones cardiacas y accidentes cerebrovasculares a través de un cálculo y medición con biomarcadores en las muestras.
En función a las áreas verdes cercanas a estos actores se utilizó un sistema de medición de NDVI. Con la ERA se lograron medir los niveles de contaminación en el aire y las exposiciones en la vialidad. Esto se clasificó en varios estudios:
Primer estudio
Este primer estudio se basó en una evaluación del impacto de los espacios o áreas verdes en los biomarcadores. En un nivel individual de lesiones en los vasos sanguíneos y en otro, con enfermedades cardiovasculares.
Ante esto, el hallazgo que realizaron los investigadores fue realmente sorpréndete. La idea de vivir en áreas verdes con un nivel de densidad mayor, se vincula con una exposición menor de concentración urinaria de isoprostanos F2, indicadores del estrés oxidativo.
El efecto era inmediato y reparador sobre los daños o lesiones en los vasos sanguíneos. También, se encontró una baja concentración urinaria de biomarcadores del estrés por epinefrina.
Por otra parte, los vínculos encontrados entre la epinefrina y estos efectos, era mayor entre las mujeres. Especialmente en las que no ingieren bloqueadores beta y las que nunca han padecido de un ataque cardiaco.
Publicaciones realizadas del estudio
El estudio se publicó en el Journal of the American Heart Association, en donde los resultados fueron considerados como independientes de elementos como:
- El sexo
- La edad
- El origen étnico
- Si era fumador o no
- El uso de estatinas
- Nivel de privaciones
- Exposiciones altas en la vialidad
Como conclusión final, los especialistas indicaron la importancia de contar con más espacios verdes en cercanías de viviendas y condominios. Sin embargo, esta condición puede no ser reconocida dentro del medio de expertos en enfermedades cardiovasculares.
Además, la enorme potencia que ofrecen los resultados de la investigación indica que podría mejorar la salud pública. Lo que realmente nos deja con una interrogante ¿Las autoridades desean que las personas se mantengan sanas?
El poder de la salud en nuestras manos
Ante esta investigación tan nutritiva para las personas, tenemos en nuestras manos el poder de estar sanos. La idea es evitar el consumo de fármacos y vivir saludablemente bajo un ambiente verde.
Si vivimos cerca de un terreno olvidado, podemos unirnos en comunidad y crear un excelente espacio ecológico. Lleno de vegetación e incluso algunas frutas o vegetales para el consumo propio. Lo importante es mantenernos sanos y si la solución está en nuestra manos, porque esperar para ejecutarlo.
El estudio muestra, claramente, los efectos positivos de esta actividad verde. La idea es mejorar los espacios que tengamos cercanos o incluirlos en nuestra planificación.